Tráiler oficial de Maléfica. 90 segundos.
Maléfica (2014). Maleficent. EE UU. Género: fantasía. Duración: 97 minutos. Dirección: Robert Stromberg. Intérpretes: Angelina Jolie, Elle Fanning, Sharlto Copley, Sam Riley, Juno Temple, Lesley Manville, Imelda Staunton, Kenneth Cranham, Ella Purnell, Brenton Twaites, Christian Wolf-LaMoy, Isobelle Molloy. Guión: Linda Woolverton. Música: James Newton Howard. Fotografía: Dean Semler. Montaje: Chris Lebenzon y Richard Pearson. Diseño de vestuario: Anna Biesrzycka Sheppard.
Isobelle Molloy como Maléfica niña.
Angelina Jolie como Maléfica adulta, hada protectora de Las Ciénagas.
Elle Fanning como Aurora, ante una de las criaturas de Las Ciénagas.
Trama.
Dos reinos enfrentados, uno gobernados por un rey avaricioso de poder y Las Ciénagas, un lugar maravilloso poblado por todo tipo de criaturas y defendido por Maléfica, una hada niña, hermosa y buena. Pero un día un muchacho llega a Las Ciénagas y ambos reinos se mezclan: el amor, la ambición, el odio... ¿Por qué Maléfica maldice a Aurora? ¿Y quién se salvará?
Maléfica, acechando a Aurora.
Opinión.
Puede parecer excesivo que haya batido un récord mundial del género con sus 600 millones de dólares hasta principios de julio, pero es cierto que es una película notable.
Es una (muy) heterodoxa refundación Disney del mito de La Bella Durmiente (su famosa y negrísima Sleeping Beauty de 1959), con múltiples y complejas referencias a la literatura fantástica, el cine de la casa e incluso El Señor de los Anillos (notable la construcción de la escena en la batalla en que el rey está postrado esperando la muerte), con una Angelina Jolie carismática y bellísima que proporciona una amplia banda de matices a su personaje, poderosa en cada escena y convincente en sus transformaciones psicológicas, mientras que sus compañeros dan un magnífico tono con los destacados Fanning como princesa Aurora, Copley en el papel del rey atormentado por la ambición y el remordimiento, Sam Riley como ayudante volador de Maléfica, o las hadas Temple, Manville y Staunton.
La música es adecuada, sin destacar sobre la historia, y lo excepcional queda sabiamente para la invención visual del director y de la guionista, Woolverton (la misma que trabajó en El Rey León o Mulan), con imágenes rotundas y giros de guion que sorprenden pero son creíbles, jugando con lo tenebroso hasta rozar el límite permisible en una película infantil, sin molestar jamás. Y los efectos especiales siguen superándose año tras año, no tanto en los vuelos de las hadas como en la recreación del mundo fantástico de Las Ciénagas.
Fuentes.
Costa, Jordi. La mala mujer que no sale en los cuentos. “El País” (30-V-2014). Muy elogiosa.
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